El delantero uruguayo Luis Suárez ha sido una de las piezas claves para que su club, el Barcelona, llegue a la final de la Champions League, entre otras cosas por los seis goles que ha marcado.
Pero su conocida faceta extrafutbolística, llena de polémicas, también revivirá viejos duelos en el encuentro del próximo 6 de junio frente a la Juventus. Y es que en el club italiano militan Giorgio Chiellini y Patrice Evra, quienes han tenido fuertes encontrones con el 'Pistolero'.
HISTORIA DE UNA MORDIDA
Lo de Chiellini fue lo más reciente y comentado. Ocurrió en el último Mundial de Brasil, el año pasado, cuando Suárez pegó un mordisco en el hombro al italiano. El resultado: la FIFA lo castigó con nueve partidos y cuatro meses de suspensión. Por eso no podrá jugar la próxima Copa América con Uruguay, por ejemplo.
Tras el incidente, Chiellini aceptó las disculpas de Suárez y tildó de "excesiva" la sanción de la FIFA. "Afronto el partido con total tranquilidad, es un episodio que ya forma parte del pasado", dijo el central tras eliminar al Real Madrid en el Bernabéu.
"Seguro que le ha hecho madurar, pero no debemos hacer de esto un aspecto central del partido", agregó.
EL CASO EVRA
La disputa con Evra, en cambio, fue más larga y tiene sus orígenes en Inglaterra, cuando Suárez jugaba en el Liverpool y el francés en el Manchester United. Tras un encuentro entre ambos equipos, Evra acusó a Suárez de haberle lanzado insultos racistas por los menos diez veces. Esto le costó una sanción al uruguayo de ocho partidos.
Meses después, cuando volvieron a encontrarse, Suárez le negó el saludo a Evra, quien le increpó el gesto. Todo el resto del partido estuvo marcado por asperezas.
Evra también ha sido consultado sobre el hecho de que se cruzará con Suárez. "Le daré la mano, pero me aseguraré de que sienta mi presencia", ha dicho.
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