No son fantasmas los que acechan mientras duermes. No los puedes ver, pero te afectan negativamente. Diferentes estudios señalan que el nivel de radiación electromagnética de los equipos wi-fi es hasta diez veces más alto que el emitido por las antenas de telefonía celular. Por ello, afirman los especialistas, las personas deben evitar una sobreexposición a dichas ondas apagando el módem por las noches.

Rolando Adriano, investigador del Instituto Nacional de Investigación y Capacitación de Telecomunicaciones de la Universidad Nacional de Ingeniería (Inictel-UNI), explica la diferencia entre las ondas wi-fi y las de telefonía celular. "Hemos realizado trabajos de investigación desde hace 12 años en antenas ubicadas en Santiago de Surco, Chorrillos, San Isidro, San Borja, Huaral, Huacho y Cuzco, y ninguna ha alcanzado más del 2 por ciento del limite", sostuvo en diálogo con la agencia Andina.

La señal wi-fi, afirma el especialista, presenta niveles mucho más altos alcanzando entre el 10 y 15 por ciento del límite, y su impacto es mayor teniendo en cuenta su uso en ambientes cerrados. "La radiación se concentra en habitaciones del hogar y hace que su efecto sea más prologando", comentó el investigador aunque subrayó que no hay aún casos probados de daño al organismo por exposición a estos niveles de radiación. 

Sin embargo, como una medida de precaución, Adriano recomendó no dormir con el módem wi-fi encendido para evitar exponer al organismo a esta energía de forma innecesaria. "Apagar el wi-fi debes".


Fuente: Andina.