(EFE).- El alcalde del municipio mexicano de Cocula, César Miguel Peñaloza, fue detenido de manera preventiva por la desaparición de 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, en el estado sureño de Guerrero, informó una fuente oficial.
El gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, dijo que Peñaloza está detenido y no desaparecido, como lo denunciaron el fin de semana su esposa, Lizbeth Alarcón Rodríguez, y el diputado del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) Miguel Alonso Raya.
"Está arraigado" (detención preventiva) en la Seido (Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada) "por la desaparición de los normalistas y todo el drama que se ha vivido en la región", dijo Ortega a Radio Red.
El diputado Raya y la esposa del alcalde afirmaron que desconocían el paradero de Peñaloza desde el pasado viernes, cuando el político se desplazó a la capital mexicana para responder a un citatorio de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía).
Consultadas por Efe, fuentes de la fiscalía dijeron desconocer si el alcalde está o no está detenido en las instalaciones de la Seido.
En declaraciones a Milenio televisión, Raya pidió a la PGR que informe si el alcalde se presentó o no a declarar, ya que el fin de semana no se presentó a una actividad que tenía prevista en su municipio con motivo de las festividades de fin de año.
"Las autoridades que están investigando un asunto tan delicado como la desaparición de los 43 muchachos de Ayotzinapa debe cuidar a personajes como al que nos referimos para efectos de garantizar la investigación", señaló.
El diputado pidió a las autoridades esclarecer el móvil de la desaparición de los jóvenes el 26 de septiembre pasado en el municipio de Iguala, vecino a Cocula, tras una serie de ataques a tiros presuntamente ordenados por el entonces alcalde, José Luis Abarca, en los que murieron seis personas y 25 resultaron heridas.
Según la investigación oficial, los estudiantes de entre 18 y 21 años fueron detenidos por policías de Iguala y Cocula y después entregados a miembros del cártel Guerreros Unidos.
De acuerdo con tres integrantes del grupo criminal detenidos, los jóvenes fueron asesinados e incinerados en un basurero de Cocula para desaparecer su rastro, una versión en la que no creen sus familiares.
Aunque un laboratorio de Austria confirmó que uno de los restos encontrados por las autoridades corresponden a Alexander Mora, uno de los 43 desaparecidos, el equipo forense argentino que participa en la investigación aclaró que "no fue testigo del hallazgo del fragmento que culminó en esta identificación".
Por este caso hay unos 80 detenidos, de los cuales más de una decena son policías del municipio de Cocula.