Corea del Norte responsabilizó hoy a Estados Unidos de los repetidos ataques informáticos que están sufriendo sus principales medios estatales, y acusó al presidente Barack Obama de "forzar" el estreno del filme The Interview el día de Navidad.

En un nuevo capítulo de las tensiones entre Pyongyang y Washington en torno a la controvertida película, el régimen liderado por Kim Jong-un volvió a negar que esté detrás del "hackeo" a Sony Pictures, e instó a la Casa Blanca a presentar pruebas de sus acusaciones.

"Una vez más, queremos dejar claro que Corea del Norte no tiene nada que ver con los ataques de 'hackers' a Sony Pictures", declaró un portavoz de la Comisión Nacional de Defensa norcoreana en un comunicado recogido hoy por la agencia estatal de noticias KCNA.

Pyongyang recurrió a un tono más beligerante a la hora de señalar directamente a Obama como "principal culpable de forzar el estreno de la película el día de Navidad", y lanzó sus ya habituales insultos con tono racista contra el presidente estadounidense.

"Obama siempre habla de forma imprudente y actúa como un mono en una selva tropical, y ha tratado de minar la dignidad de nuestro liderazgo supremo", señaló el portavoz en alusión a la película, una comedia sobre un complot estadounidense para asesinar al dictador norcoreano, Kim Jong-un.

Mientras, las páginas web de los principales medios estatales norcoreanos como la citada agencia KCNA y la del diario Rodong del Partido de los Trabajadores continuaron hoy sufriendo caídas intermitentes por quinto día consecutivo, y que según Pyongyang han sido provocadas por Washington.

"Estados Unidos, un gran país, ha empezado a obstaculizar las operaciones de internet de los mayores medios de nuestro país y sin vergüenza alguna", señaló el comunicado del régimen, que se refirió por primera vez a los problemas de estas páginas.

Aunque los errores de conexión son frecuentes en la frágil intranet local norcoreana, muchas voces apuntaron a EE.UU. después que el pasado día 19 Obama prometiera una "respuesta proporcionada" al ciberataque a Sony Pictures, del que Washington acusó a Corea del Norte.

Un grupo llamado "Guardians of Peace" ("Guardianes de la Paz") se atribuyó el ciberataque, advirtió de que sembraría el terror en los cines que mostraran la película y comparó su plan con los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos. (Efe)