María Clara Montoya Olaya
Madrid (EFE).- El proceso de paz en Colombia está en "cuidados intensivos", afirmó el procurador general de este país, Alejandro Ordóñez, en una entrevista con Efe.
El procurador, que se encuentra de visita en España junto a un equipo de trabajo, dijo que el proceso de paz que mantiene el gobierno de Juan Manuel Santos con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) "está en crisis y hay que rescatarlo".
Ordóñez expresó que "todos los colombianos anhelamos la paz pero esta no puede venir sin condición alguna".
El Gobierno de Colombia inició en noviembre de 2012 conversaciones de paz con las FARC en La Habana y desde entonces se han logrado acuerdos parciales sobre los puntos referidos a desarrollo rural y reparto de tierras, participación política de la guerrilla y el problema del narcotráfico y los cultivos ilícitos.
En estos momentos se negocia el punto referido a la reparación de las víctimas del conflicto, uno de los aspectos más polémicos del diálogo, y quedan pendientes el cese del fuego y el abandono de las armas de la guerrilla.
"Los colombianos somos escépticos con el proceso porque las FARC no han dado muestras de que quieren la paz", declaró el procurador.
Para que este proceso siga adelante hay que "exigir unos mínimos" a la guerrilla de las FARC, como son "las penas de cárcel, el desarme total y una desmovilización absoluta", dijo.
"Las FARC han seguido sembrando minas antipersonales, han seguido reclutando niños y cometiendo acciones contra la sociedad civil", lamentó Ordóñez.
El alto cargo, que ha tenido diferencias con el gobierno de Santos por sus críticas al proceso, dijo que a este gobierno "le ha faltado el liderazgo necesario para concitar al pueblo en torno al proceso de paz".
"Ni el gobierno es ilegitimo por intentar conseguir la paz mediante el dialogo, ni los críticos son enemigos de la paz", recordó.
Según Ordóñez, son precisamente los críticos los que pueden "validar y relegitimar este proceso en cuidados intensivos".
Afirmó que la institución para la que trabaja "seguirá hablando". "El procurador no se callará, ni puede, ni debe, ni quiere, porque quiere cumplir con sus deberes constitucionales", dijo.
Otra de las cuestiones abordadas fue la negativa de Ordóñez a la suspensión de aspersiones con el herbicida glifosato sobre cultivos de coca en el país.
La decisión fue tomada hace unas semanas por el Consejo Nacional de Estupefacientes a petición de Santos, que a su vez se basa en un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que clasificó ese herbicida como primero en la lista de los cinco plaguicidas probablemente carcinogénicos para los humanos.
Para Ordóñez no existen "ni razones jurídicas ni razones científicas para suspender las aspersiones de glifosato".
La decisión, según el procurador, fue "un regalo envenenado, una decisión política con un envoltorio muy bonito cuyos beneficiarios son las FARC, el ELN y las mafias".
Ordóñez denunció que en toda Colombia han aumentado las hectáreas de cultivo de coca "por la suspensión de la fumigación".
Preguntado sobre si España puede ser un aliado respecto al proceso de paz en Colombia dada su experiencia con la banda terrorista ETA, el procurador dijo que España "no es desechable para Colombia respecto al proceso de paz" pero que "la experiencia no es homogénea".
La agenda de Ordóñez en España continúa en Barcelona hoy, para tratar las mismas cuestiones de las que habló ayer con unos doscientos compatriotas en Madrid: el acuerdo de pensiones que Colombia mantiene con España y la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras.
El jueves, Ordóñez regresará a la capital española para ser nombrado académico honorario de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España en un acto en el que pronunciará la conferencia "La justicia y el derecho ante el conflicto". EFE
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