"El cine actual sirve para tratar de lidiar y construir la identidad de un pueblo", declaró a Efe el director de cine peruano Juan Daniel F. Molero en la capital tailandesa.
El joven realizador presentó en Bangkok su segundo largometraje, "Videofilia (y otros síndromes virales)", que se proyectó en noviembre en el World Film Festival de Bangkok en la sección de Cine Latino, donde obtuvo buena acogida entre el público asistente.
Según el director, el cine en Perú ha sido siempre "débil y chiquito", sin ninguna fuerza, pero ahora empieza a surgir como cine rural o folclórico.
"Poco a poco vamos reivindicando varias tradiciones nuestras sin avergonzarnos. Hasta ahora teníamos interiorizada la cultura andina como algo menor, algo que nos acomplejaba".
Después de pasar por diferentes festivales como el de Rotterdam o el de Lima Independiente, donde se llevó elogios y premios, Molero desembarca con su largometraje en Asia, donde realizará además una pequeña gira para participar en diversos certámenes en Singapur y la India.
Tras la ópera prima, "Reminiscencias", con "Videofilia (y otros síndromes virales)", el autor aseguró que ha realizado una obra especialmente singular en el espectro cinematográfico peruano:
"Con mi película he querido representar a la gente normal, sin que estén estereotipados, tanto a nivel generacional como muy local, uniendo la tradición andina con la tecnología, es como un retrato de la Lima marginal, muy poco representada en películas".
El planteamiento del largometraje es aunar lo real con lo virtual, lo tradicional con lo tecnológico, a través de las experiencias de dos jóvenes en la Lima actual.
"Lo que ves en una película no son sólo imágenes, sino que es el punto de vista del editor que transfiere al espectador creando una identidad propia, como han hecho los estadounidenses a través de sus películas".
El realizador peruano, de 28 años, se define como alguien de una generación que ha crecido tras la crisis, el terrorismo y la dictadura militar en Perú, una nueva generación nacional que empieza a ver su identidad sin miedo, sin complejos.
"En realidad lo que solemos hacer en Perú es lo que exportamos, pensando todo hacia el exterior, lo que interesa a Occidente y yo he intentado crear una película dirigida a los peruanos, presentando a las nuevas generaciones como son".
El cineasta sostiene que la sociedad peruana tiende a ver su propia cultura "desde un punto de vista occidental ante la crisis de identidad del propio pueblo":
"El cine latino o peruano tiene su misión, su tarea: dedicarse a hablar de su gente. Ya para la modernidad está Japón o Estados Unidos. Es algo que está dentro de la mente de todo peruano".
Para Molero ésta es su primera incursión en el mercado asiático, aunque asegura que es un gran seguidor del cine oriental desde que realizaba animación a los dieciocho años.
"En Asia realizan un cine muy extremo, tienen una perspectiva muy diferente de la moral. En Occidente parece muy claro lo que es correcto e incorrecto, teniendo una postura muy juiciosa, parece que al occidental le cuesta ponerse en el lugar del otro".
El World Film Festival de Bangkok se celebró del 13 al 22 de noviembre y además de la película de Molero por parte iberoamericana se proyectaron otros dos largometrajes peruanos "Climas" y "Hija de la laguna", el mexicano "Los Hamsters", el argentino "Cronopios y Famas" y el documental brasileño "Gastronomía urbana". (EFE)
(Foto de cabecera: grupoas.com.pe)