Escribe: Víctor Liza (@elgatocontabas)

El 24 de noviembre del año pasado, el titular de la Dirección General de Hidrocarburos (DGH) del Ministerio de Energía y Minas (MEM), Percy Velarde, comunicó a Carolina Noriega Ackermann, gerente general de Gases del Norte del Perú; que esta compañía había obtenido la concesión del gas en la región Piura.

Este hecho no tendría nada de raro si no fuera porque la sociedad civil de Piura, especialmente en Talara, ha tomado conocimiento de este hecho la semana pasada, mientras esperaba una definición de la DGH sobre el tema. 

Al mismo tiempo, diversos actores sociales de Piura, como los sindicatos de trabajadores petroleros; el alcalde de Talara, José Bolo Bancayán; las congresistas Karla Schaeffer y Marisol Espinoza; se opusieron a la concesión a Gases del Norte, en principio, por las irregularidades presentadas en el proceso, y porque su oferta – en tarifas y cobertura de la masificación- no representaba beneficio para la población piurana.

Además, el propio MEM, a través de la DGH, denegó hasta en dos ocasiones la concesión a Gases del Norte, como lo muestra esta comunicación de mayo del 2016 .

Sin embargo, a fines de noviembre cambió de opinión.

UN CONCURSO CON GANADOR ANULADO 

En 2014, había la necesidad de que el gas, ya presente en ciudades como Piura, Sullana y Sechura, se masifique y llegue hasta provincias como Ayabaca, Morropón y Huancabamba. 

Por ello, se presentaron a un “Concurso de Parte” dos postores: Sechura Oil & Gas y Gases del Norte, esta última, perteneciente al grupo Promigas, dueña también de Cálidda (Lima), Contugas (Ica), Gases del Pacífico (Ancash, La Libertad, Lambayeque y Cajamarca), es decir la mayor concesionaria de distribución de gas en todo el Perú.

El 24 de febrero de ese año, asumió como ministro de Energía y Minas Eleodoro Mayorga, quien sería responsable político de este proceso. Un reciente informe de Cuarto Poder da cuenta de que Mayorga llegó al puesto a instancias de la entonces primera dama, Nadine Heredia.

El 6 de noviembre de ese año, la DGH otorgó la buena pro a Sechura Oil & Gas. Ante ello, Gases del Norte apeló la decisión. En pleno proceso, el ministro Mayorga invitó, en enero del 2015, a ambas compañías a "formar un consorcio", lo cual no fue aceptado por la empresa ganadora. 

A fines de enero, el MEM anuló las bases del concurso y convocó a un nuevo proceso, hecho que fue cuestionado por la empresa ganadora Sechura Oil & Gas.  

En el programa "Agenda Política" de Canal N, conducido por el periodista Enrique Castillo, esto fue lo que dijo Mayorga el 1 de febrero:

En aquel programa, Mayorga indicó que invitó a ambas empresas "para evitar que se judicialice" el tema; y que no se trataba de un concurso, sino que Sechura había alcanzado un puntaje mayor. Agregó que había que reformar las bases del mismo.

Las explicaciones de Mayorga no convencieron y se le acusó de haber interferido en el proceso.  

El 17 de febrero Mayorga era reemplazado por Rosa María Ortiz, quien se quedó en el puesto hasta el final del gobierno de Ollanta Humala. Sin embargo, Raúl Pérez Reyes, cercano a Mayorga, se quedó como viceministro de Energía, y por ende como responsable de ese proceso. 

Al cabo de un nuevo proceso fallido, quedó Gases del Norte como postor único en el proceso de concesión de la distribución de gas natural en la región de Piura. Sin competencia a la vista, parecía que adjudicarse la buena pro sería cosa fácil.

Pérez Reyes, quien acaba de renunciar al viceministerio, firmó en setiembre del 2016 el documento que haría factible la concesión a Gases del Norte .

PROPUESTA SIN LICENCIA SOCIAL

A fines de febrero del 2016, Gases del Norte presentó un plan tarifario que según diversos especialistas, como el exministro de Energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi; el expresidente de Petroperú, César Gutiérrez; no favorecería la masificación del gas en Piura, e incluso lo encarecería. 

Con esto coincidieron el alcalde Bolo Bancayán, los representantes de los sindicatos de Petroperú liderados por Juan Castillo More; y las congresistas Espinoza y Schaeffer, así como el Colegio de Ingenieros del Perú. La propia Defensoría del Pueblo advirtió que se podría producir un conflicto social en la región Piura, debido al encarecimiento del gas.

Por su parte, el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) realizó 58 observaciones a las propuestas tarifarias de Gases del Norte, pues indicó que los piuranos pagarían el doble de lo que se paga en Lima pese a que el gas se produce en su suelo.

Además de ello, la propuesta de Gases del Norte también implicaba la expropiación de los gasoductos de la central Malacas, perteneciente a la multinacional italiana Enel así como convertir a la Refinería Talara en cliente regulado lo cual implica que sería cliente perpetuo de la concesión a los precios de la concesión, impidiéndole comprar gas natural barato como cliente libre. De esta manera se pone en peligro el proyecto de modernización de esta última por los sobrecostos.

En mayo del 2016, Gases del Norte sufrió otro revés: su propuesta había sido declarada "improcedente" por la DGH.

Una vez presentada la denegatoria de la concesión a Gases del Norte por los temas expuestos, líderes de opinión, congresistas y diversos colectivos de la sociedad civil solicitaron a Proinversión convoque una licitación internacional en la que participen diversas empresas asegurando mejores condiciones para una verdadera masificación.

NUEVA APELACIÓN CON FINAL FELIZ PARA GASES DEL NORTE

Gases del Norte no se rindió y presentó una nueva apelación, esta vez a la negativa de la DGH a su propuesta para hacerse del gas en Piura. Este organismo rechazó esta apelación, pues sostuvo que no tendría "suficiente gas" para la región.

Sin embargo, en noviembre, el MEM aceptó la apelación y devolvió el asunto a la DGH, que el 24 de noviembre falló a favor de Gases del Norte, sin que propios y extraños conocieran de esta decisión. 

¿EL MISMO MODUS OPERANDI?

Tanto un reportaje de Cuarto Poder del último 11 de febrero, como un informe del periodista Martín Hidalgo en el diario El Comercio, dan cuenta de que Mayorga y Heredia influyeron para que el consorcio integrado por Odebrecht y Graña & Montero se hiciera de la buena pro del Gasoducto del Sur, pese a no tener las condiciones para operarlo.

La comisión que investiga el caso Lava Jato en el Congreso, presidida por Víctor Albrecht, recogió la versión del representante de Odebrecht, Jorge Barata; quien indicó que Heredia propuso a Mayorga como ministro "para lograr este cometido".

El mismo modus operandi ha sido aplicado en la concesión de gas en Piura: una empresa (Promigas-Gases del Norte) que no cuenta con las condiciones ni la licencia social para operar en la región; pero al final resulta beneficiada.

Según diversos opositores a la concesión, esto ha sido posible por obra y gracia de un hombre cercano a Mayorga como Pérez Reyes, quien continuó como viceministro de Energía gracias a que el 5 de agosto fue ratificado por el presidente Pedro Pablo Kuczynski y el actual ministro de Energía y Minas, Gonzalo Tamayo.

El último 16 de febrero, justo el mismo día en que se conocía en Piura que Gases del Norte se había hecho de la buena pro del gas en la región, Pérez Reyes renunciaba al puesto.

Lo ocurrido con el gas en Cusco y Piura son dos muestras de un botón, que podría tener más en otras concesiones de hidrocarburos realizadas en estos años.