La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, obtuvo en marzo un apoyo ciudadano del 37%, nueve puntos porcentuales menos que en enero pasado, según una encuesta difundida hoy en Santiago, que mostró también una merma en la credibilidad de la mandataria. 

El estudio, realizado por la Consultora Mori y el Centro de Estudios de la Realidad Contemporánea (CERC), refleja el impacto que han tenido tanto en el Gobierno como en la oposición los casos de corrupción que se han conocido durante los últimos meses en el país.

El rechazo a la gestión de Bachelet aumentó hasta el 52% en marzo, diez puntos porcentuales más que en la encuesta anterior.

La directora de Mori, Marta Lagos, atribuyó este repunte al llamado caso Caval, un polémico negocio inmobiliario en el que estuvo involucrado el hijo y la nuera de la presidenta.

Lagos consideró que la ciudadanía reprobó que la mandataria no censurara públicamente el comportamiento de su hijo mayor, Sebastián Dávalos, que participó junto a su esposa, Natalia Compagnon, en una reunión con el empresario Andrónico Luksic, vicepresidente del Banco de Chile, en noviembre de 2013.

Este caso, que está siendo investigado por la Fiscalía, ha golpeado también la credibilidad de Bachelet, uno de sus atributos más valorados por los chilenos.

El porcentaje de encuestados que "no le cree nada" a la mandataria creció del 26% al 39%, mientras que solamente el 10% mantiene la credibilidad, frente al 18% que lo hacía en enero.

El Gobierno en su conjunto también se ha visto perjudicado por la polémica, con un aumento de la desaprobación del 42 % al 52 %, mientras que el apoyo cayó nueve puntos porcentuales, hasta el 37 %.

La oposición de derecha, en tanto, registró en marzo niveles mínimos de aprobación ciudadana inéditos desde 1990, debido a sus vínculos con Penta, un banco de inversiones cuyos dueños están en prisión preventiva acusados de delitos tributarios y que presuntamente financió ilegalmente campañas electorales de políticos de la Unión Demócrata Independiente (UDI). (EFE)